Para bajar de peso se ha demostrado que no solo es comer menos a lo acostumbrado, inclusive es contraproducente realizar dietas tan estrictas que no son sostenibles en el tiempo; más importante que la cantidad es la calidad de los alimentos que decidimos consumir. Y además algunas recomendaciones sencillas que te ayudaran en el proceso.

• No tengas a la mano los alimentos que no quieres comer: ya lo has intentado y los resultados no han sido buenos, la fuerza de voluntad no es suficiente y siempre caes en la tentación de comerte lo que tienes a tu vista constantemente. Saca de tu alacena, nevera, escritorio o tus escondites los alimentos que sabes no son buenos para ti, tanto para bajar de peso como para tu salud. Pon a la vista alimentos como frutas, verduras, frutos secos, chocolate amargo, yogurt griego, preparaciones hechas en casa. En la oficina puedes tener frutos secos, frutas y trocitos de verduras. Prefiere el agua en vez de gaseosa, te o jugos. Endulza con stevia natural.
• Come porciones pequeñas: cuando te sirvas comida en el plato pon porciones pequeñas así tengas mucha hambre. Cuando tenemos demasiada hambre es muy posible que sirvamos porciones más grandes de las que necesitamos para estar satisfechas, comemos más de la cuenta y luego quedamos inflamadas y con indigestión.
• No vayas al supermercado con hambre: muy relacionada con la anterior, compramos más de la cuenta o productos de paquete. Antes de ir al supermercado come algo.
• Come despacio, mastica más: cuando empezamos a comer y llegue la señal a nuestro cerebro de que ya estamos satisfechas y no necesitamos comer más, pueden pasar 20 minutos, imagínate todo lo que podemos comer en 20 minutos si comemos muy rápido. Mastica un poco más, no tragues entero, saborea y disfruta los alimentos. Nos encanta comer, pero aceleramos el momento.
• Respira: antes de empezar a comer respira profundamente 5 veces, estarás más tranquila y podrás comer menos.
• Realiza algo de actividad física: No tiene que ser una actividad extenuante de 2-3 horas, muévete un poco más, camina, sube las escalas, practica un deporte que te guste, baila. No importa sin son 10 minutos, es mejor a no hacer nada.
• Conéctate contigo misma: levántate 10 minutos antes y concéntrate en tu respiración, hazlo en una posición cómoda, más no acostada porque te puedes dormir nuevamente. Te ayudara a estar más tranquila en el día.
• Toma agua durante el día: a veces confundimos la sed con hambre. Si comiste una comida principal hace poco y de repente sientes hambre, muy probablemente no es hambre física, es un antojo.
• No escuches a los demás, solo a ti: muchas personas comen más de lo que necesitan por el entorno que tienen alrededor, familiares y amigos nos incitan a comer más.
• No te desesperes: todos quisiéramos bajar 10 kilos en una semana, pero no es algo real o seguro. Te ha tomado muchos años estar como estás, no puedes pretender ver resultados en los primeros días. Ten paciencia, si eres constante los cambios se empezaran a notar.